Desde el centro de interpretación del parque, parten 3 senderos circulares que pasan por antiguas turberas. Elegimos finalmente el azul y como se quedo corto hicimos también el amarillo. Nos hubiera gustado subir hasta la cima, pero el tiempo nos venía un poco justo,ya que habíamos quedado con la dueña del alojamiento para prepararnos la cena.
Como veis el camino se hace mediante plataformas de madera,ya que el suelo suele estar bastante embarrado. Fuera de las zonas húmedas, notas el suelo acolchado.Es una sensación algo extraña. Toda la zona forma parte de una antigua turbera usada para extraer la turba. En muchas casas hoy en día se ven apilados los bloques,ya que son utilizados como combustible en las chimeneas.
El fuego de turba,quema distinto y huele distinto.Como dicen por aquí.Noche de lluvia, y un buen fuego de turba. También se acepta un whisky irlandés como sustituto.
Una turbera es un tipo de humedal ácido en el cual se ha acumulado materia orgánica en forma de turba.
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